Jesús Omar Ojeda, el testigo que llamó a la policía bonaerense y descubrió la maniobra del ex funcionario José López arrojando bolsos con dinero en un convento de General Rodríguez, afirmó que el ex secretario de Obras Públicas "saltó el portón" del monasterio "pero para entrar a la cocina alguien le abrió la puerta", y agregó que el portón principal del predio "se abrió desde adentro recién a las 5.30 de la mañana" del martes último.
En declaraciones a radio Continental, Ojeda, vecino del monasterio "Nuestra Señora del Rosario de Fátima", contó que vio cómo López arrojó los bolsos por encima del muro del convento y luego saltó, pero que "como a las 5.30, 5.40" cuando "abren la puerta de adentro, recién entró la policía", aunque no pudo determinar qué ocurrió en las casi dos horas que el ex funcionario permaneció dentro del predio.
"La policía esperó ese tiempo fuera del monasterio", añadió.
Al abrirse el portón, "López sale caminando para el lado de la puerta y se encuentra con la policía", narró el testigo, y describió que "el hombre como que ni le veía" al efectivo de la bonaerense.
Ojeda explicó que lo llamaron 2.30 de la mañana "para cargar los pollos como todos los días" y que al volver dejó su camioneta, se acostó, y al escuchar ruidos pensó que querían robarlo y miró por la ventana.
"Vi un auto y dije ¿qué hace ese auto acá?. Salí y el hombre tocaba el timbre del portón. Empezó a tirar los bolsos para adentro y me dice 'ahora sí' y saltó", continuó el vecino, quien al ver "que no salía, no salía" llamó a la Policía.
"Pensé que le iba a robar a las monjitas", justificó Ojeda su llamado al 911, quien precisó que tras ingresar al convento López dejó el auto "en marcha pero cerrado", y dijo que no supo que se trataba del ex secretario de Obras Públicas hasta que trascendió su detención en los medios, "porque nunca lo había visto", y que tampoco los policías "al principio no sabían quién era".
Ojeda fue llevado como testigo por los efectivos policiales y allí pudo ver que "en la cocina hasta había un pocillito de té", por lo que especuló que López pudo haber estado allí en el extenso lapso que transcurrió entre su ingreso al monasterio y la entrada de la Policía, y que "los bolsos estaban a la vista".
Respecto del ofrecimiento de coimas por parte de López al personal de la Bonaerense, Ojeda no pudo confirmarlo ni negarlo. "Nunca lo escuché", indicó.